sábado, 17 de septiembre de 2011

ALPEN MASTER:PRIMER DÍA

No podemos empezar mejor el día, nos despertamos con un sol radiante que nos transmite ánimos para montarnos en las motos y disfrutar del día que nos espera, para ser más concretos 4 de los 13 ptos a enlazar de todo el arco alpino.
Nos despedimos de la capital de la Provenza y nos adentramos hacia el Parque natural de Verdón con un intenso aroma a lavanda y romero que me dejan fascinado, a parte de esto las carreteras de la ruta son de las que me encantan, sin rayas pintadas, el ritmo que llevamos es ligero y en una hora y media nos encontramos tirandonos fotos en el mirador del lago que forma el río Verdon,
 por supuesto con las motos hasta el mismo mirador, sin entretenernos mucho ponemos rumbo hacia el cañon du Verdon, el más grande de Europa, no esta mal para empezar el día, una vez allí subimos por el lado norte, que a pesar de ser espectacular no es tan bonito como el sur debido a los acantilados por los que te contorneas con la moto.
Una vez superado este inmenso cañón nos dirigimos a lo que nos interesa el Col de la Bonette, y lo hacemos a través de les gorges de cyans,

precioso y  muy laborioso de conducción y después de dos horas de conducción llegamos a los pies del gran Col de la Bonette, el más alto paso de Europa o al menos eso reza en los carteles, pero antes de llegar arriba pasamos por el Col de Raspaillon,

desconocido por muchos pero ahí esta y es otro más de la lista, sino sabes muy bien que buscas lo más seguro es que te suceda lo que a todos es decir que te lo saltas, a pesar de ser bonito puesto que aquí nacía un glaciar.
Seguimos trepando y emerge majestuoso entre las montañas el numero uno, por supuesto no paramos hasta el punto más alto, aunque según muchos lo sea haciendo trampa, pero ahí está imponente.

Una vez realizadas las fotos de rigor descendemos rápidamente porque todavía tenemos que pasar a Italia y volver a dormir a Francia, es decir nos queda un largo trecho por recorrer, aunque mientras bajamos no nos olvidamos del Col de Restefont

que tiene la mala suerte igual que el Raspaillon de estar al lado de un gigante que los eclipsa, en este caso hay que subir por la pista para llegar hasta él pero estaba cerrada.
Después del descenso enfilamos a ritmo más que ligero hacia el Col de l´Agnel,

la subida la realizamos por Francia que no es tan espectacular como la parte Italiana pero no está mal y además si te fijas puedes ver muchas marmotas en sus alrededores, una vez culminado el Agnel nos queda una sensación de tranquilidad por haber podido completar la ruta prevista, pero no sin preocupación, puesto que han sido 450 km de alta montaña realizados practicamente sin parar, los que habéis hecho carretera de montaña ya sabéis de que hablo.