domingo, 12 de abril de 2015

TROIS CORNICHES



A pesar de ser una zona conocida y calificada como unas de las carreteras más bonitas del mundo, pocos son los que se aventuran a recorrer estas magníficas y espectaculares carreteras que discurren paralelas a lo largo del corazón de la costa azul y que tienen aproximadamente una longitud de 30 km, justo entre Nice y Menton pero resulta un corto trayecto debido a la espectacularidad.
El nombre en sí ya nos facilita algo de información sobre lo que nos espera, cualquier motorista que haya circulado por la zona ya sabe de lo que estamos hablando.
Las tres cornisas son pues, tres carreteras locales que bordean la costa azul paralelas al mar y a diferentes niveles sobre este y se denominan baja, media y alta.




La alta o grande ya era utilizada por los romanos, aunque el trazado actual fue construido en la época de Napoleón, desde esta se pueden divisar los Alpes marítimos, zona muy impactante y en ocasiones olvidada por muchos motoristas que piensan que los Alpes comienzan en Briançon.
Es importante ir con especial cuidado puesto que es una zona muy transitada por Ferraris, Maseratis y demás supercoches, así que por más rápido que creas que puedes ir, en esta zona y contra un supercoche, lo máximo que puedes hacer es estorbar, recuerda que el paso por curva de un coche es muy superior al de una moto, o sea que piensa un poquito y ponte a rebufo.
Esta carretera también es conocida porque en ella falleció Grace Kelly en un tramo de enlace con la cornisa media.




La media (472 msnm) se construyo en los años 20 para descongestionar el tráfico estival y tiene sus puntos de máxima belleza en las poblaciones de Eze y Beaulieu.




La baja (50 msnm), la más caótica discurre prácticamente a nivel del mar, en esta zona están ubicadas las lujosas residencias de actores, famosos, políticos y gentes de muy alto poder adquisitivo, a pesar de las colas kilométricas estivales tiene un encanto especial.



Como podemos apreciar en las imágenes la comida de la zona tiene una excelente pinta.





Y mientras comemos podemos disfrutar  de unas vistas sorprendentes.